

Kilo
Los níscalos son una de las setas más presentes en los bosques de otoño, un alimento sabroso y con pocas calorías. Además, se pueden cocinar de mil maneras y saborear como ingrediente de recetas o como acompañamiento.
Los níscalos son hongos de intenso sabor y de textura dura y entera para ser cocinados. Su nombre científico actual es lactarius delicious: lactaro de la leche de sus cortes y deliciosus por su agradable sabor.
Tienen un sombrero de entre 4 y 15 centímetros de diámetro, un color anaranjado con concéntricos círculos más oscuros y una forma plana. Cuentan con láminas delgadas y un pie cilíndrico que es corto, anaranjado y con manchas algo oscuros.
La carne de estos hongos es compacta, dura, algo granulosa y de un aroma agradable y un sabor algo áspero en crudo.
Los níscalos se recolectan principalmente en Cataluña, conocidos tradicionalmente como robelló, y en Castilla y León.
Su temporada va desde finales de verano hasta otoño, desde septiembre hasta diciembre.
Y son muy abundantes entre pinares jóvenes y de repoblación.
En Frutas Charito te ofrecemos el mejor género de níscalos pequeños frescos. Somos una frutería tradicional, con venta online en Madrid. Compra ya tus níscalos y te los podemos llevar a casa.
Los níscalos son setas que se componen principalmente de agua, vitaminas, fibra y minerales. No aportan grasa y son ricos en fósforo, y en ergosterol, un compuesto que pasa a ser vitamina D.
El elevado contenido de agua de los níscalos condiciona su conservación. Por ello, los frescos se deterioran enseguida. Para conservarlos bien se puede recurrir a distintos métodos:
Por un lado, se pueden secar. Para ello, se colocan en un aparato de secado que funciona con aire caliente, a temperaturas de entre 35 ºC y 40 ºC.
También se pueden congelar o confitar. En este último caso, se ponen en un cazo con mantequilla o grasa de pato, para mantener la carnosidad de la seta.
Por último, se pueden poner con vinagre aromatizado con pimiento negra en grano y ajos. Luego se escalfan y se dejan unos 10 minutos.
Los níscalos son muy versátiles y se pueden incorporar en infinidad de recetas, tanto asados como fritos: